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En la noche de los Globos de Oro 2024, Kylie Jenner se entregó por completo a su papel de acompañante. Tanto que, a pesar de ser una de las celebridades con mayor peso mediático de la gala, no posó en la alfombra roja, sino que las imágenes de su asistencia al evento nos llegaron ya durante el mismo, sentada en una de las mesas junto a su pareja, el actor Timothée Chalamet, que acudía con motivo de su nominación por su papel en Wonka.

Esto casi nos hizo perdernos su vestido, tal vez uno de los más interesantes de la noche por lo que su elección implica sobre historia de la moda. Se trata de una pieza vintage de la colección de alta costura de otoño 1998-1999 firmada por la diseñadora japonesa, una pionera absoluta en la historia de la moda nipona, Hanae Mori, que falleció en 2022.

En sintonía con la elección de sastrería firmada por Celine elegida por Chalamet, que incluía un esmoquin negro cubierto de pailettes, el modelo por el que Jenner se decantó también era de color negro y estaba salpicado de pequeñas y destellantes incrustaciones joya. Se trata de un naked dress de encaje, con escote redondo por delante y otro muy pronunciado en la espalda, dibujando una silueta reloj de arena que deja ver su piel a través de las formas del encaje, que remitían de lleno a los códigos de la elegancia Old Hollywood que pudimos percibir de manera muy prominente en las elecciones de las invitadas a esta alfombra roja. Las alfombras rojas del cine recuperan la emoción, el espectáculo y dramatismo del glamour de otro tiempo, y Jenner no ha sido ajena a esa vibración.

La tienda de piezas vintage de alta moda de Beverly Hills, Timeless Vixen, habría sido el establecimiento del que saliera este especial vestido, según afirma el mismo en una publicación en su perfil de Instagram. En la imagen podemos observar los arreglos a los que el equipo de estilismo de Jenner habría sometido al vestido, desprendiendo el tejido negro drapeado que traza una forma que recuerda a las alas de una mariposa, un símbolo muy recurrente en la obra de Hanae Mori, a la que también se le conocía como Madame Butterfly.

No es la primera vez que Kylie Jenner se inclina por la moda vintage como alternativa. Es conocido su gusto por las piezas rescatadas del archivo de Thierry Mugler o Jean Paul Gaultier. Una opción cada vez más reivindicada por las celebrities en alfombras rojas, como un gesto encaminado hacia una intención de apoyar fórmulas sostenibles de moda. Sus hermanas Kendall Jenner y Kim Kardashian comparten también esta inclinación hacia la moda vintage, a veces hasta rozar la polémica, como fue el caso de aquella gala MET en la que Kim Kardashian recuperó el vestido con el que Marilyn Monroe cantó Happy Birthday a Kennedy en 1962, una pieza de museo que sufrió daños irreparables a causa de esa decisión.

Hanae Mori se convierte en una elección interesante en el contexto de las alfombras rojas actuales. La diseñadora, fallecida el verano de 2022 en Tokio a los 96 años, fue la primera modista japonesa en entrar en la chambre de Alta Costura de París. También preparó el terreno para sus futuros compatriotas, que vendrían a sacudir por completo la moda de los años 90: Kenzo, Issey Miyake, Yohji Yamamoto y Rei Kawakubo. En su caso, según detallaba en el obituario de la diseñadora la periodista de Vogue España especializada en historia de la moda Nuria Luis, sus prendas encajaban con la tradición de la moda occidental, que Hanae Mori había vestido desde pequeña en su Japón natal, aunque después las salpicaba con motivos de inspiración japonesa. Una estética que hizo sus diseños muy populares entre la jet set de la época.

Todo esto convierte a esta inesperada elección de Kylie Jenner en uno de los estilismos más interesantes de la noche. Más aún si sumamos el misterio, ya que solo hay que lamentar el hecho de que no pudiéramos echarle un vistazo a la pieza en la alfombra roja.

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